martes, 18 de agosto de 2009

ObamaCare: Primer gran asalto contra nuestra Constitución

“We hold these truths to be self-evident, that all men are created equal, that they are endowed by their Creator with certain unalienable Rights, that among these are Life, Liberty and the pursuit of Happiness”.
Declaración de Independencia de los Estados Unidos
El Gobierno jamás crea riquezas ni la abundancia, sólo las destruye al engullirlas con un pantagruélico y voraz apetito. Todo lo que el Gobierno dirige está en bancarrota: El Medicare está en bancarrota; Medicaid está en bancarrota; El Servicio de Correos está en bancarrota; Amtrak está en bancarrota; El Seguro Social es un fraude tipo “esquema Ponzi” más grande que lo que ni en sus sueños más húmedos jamás se imaginó Madoff... y, qué extraño, también está en bancarrota.

El gobierno consume riquezas, mientras la empresa privada las crea, por eso el socialismo siempre termina en racionamiento, escasez y pobreza para la amplia mayoría de la población y poder y riqueza ilimitada para los integrantes del establishment. Y quienes lo duden que le pregunten a un ruso o a un cubano, o vean en YouTube los vídeos del pobre Pánfilo, quien ahora está en una cárcel de máximo rigor condenado a dos años por “peligrosidad pre-delictiva” una figura jurídica violatoria de todo estado de derecho, por el gravísimo delito de pedir comida. Es decir, que parejo con el racionamiento y la toma de poder del gobierno viene la represión y el despojo de todos los derechos reconocidos como inherentes a la persona humana. El Gobierno y la Empresa Privada están en las antípodas del mundo: Si la Empresa Privada falla y no produce lo que los consumidores desean o no le proporciona ganancias a los inversionistas, sencillamente queda fuera del juego y tiene que cerrar.

El Gobierno no comprende la necesidad de satisfacer las demandas de los consumidores, ni la de cumplir las obligaciones con los inversionistas, porque simplemente no produce absolutamente nada. El Gobierno sólo se ocupa de devorar el dinero de nuestros impuestos, el que nosotros, los contribuyentes, le seguimos entregando como carneros, para que los burócratas de turno lo malgasten.

Cuando el Gobierno quiere ahorrar dinero, cierra sus puertas y servicios, como hizo el Ayuntamiento de Chicago ayer lunes. Cuando la Empresa Privada quiere ganar más dinero, simplemente trabaja tiempo extra.

Cuando los astutos facilitadores políticos de la izquierda lleguen a la conclusión de que ya el Tesoro de la nación se ha convertido en el pastizal de los políticos, enviarán a Washington sólo a aquellos que puedan rapiñar la mayor cantidad de cosas gratis para ellos y nuestros valores constitucionales garantizados de propiedad privada y libre empresa desaparecerán para siempre. Si el Gobierno Socialista de Barack Hussein Obama, logra hacerse ahora con la 6ta parte de nuestra economía, será muy difícil revertir ese camino hacia la propiedad estatal. De ahí la importancia de que conectemos bien los puntos ahora y analicemos muy bien lo que hoy sucede en los países con Gobiernos de corte Populista y Socialista como los de Venezuela, Ecuador, Bolivia, Argentina y aquel en el que está hoy el núcleo principal del virus: la Cuba de los hermanos Castro.

Cuando hace ya un año comenzamos con Nobama y alertábamos de estos peligros, de llegar, como sucedió, el Organizador Comunitario a la Casa Blanca, nos acusaron de “enfebrecidos trasnochados” que anunciábamos un “apocalipsis” imposible de producirse en los Estados Unidos y lamentablemente hoy todavía hay algunos a los que los árboles no les dejan ver el bosque. Pero afortunadamente, como muestran todas las encuestas, la mayoría de los norteamericanos por fin han llegado a la misma conclusión que nosotros y están dando la batalla por nuestra libertades en los Town Hall Meetings y las Manifestaciones de Protesta. Si bien la batalla parece ganada, es importante que no nos dejemos engatusar por el Encantador de Serpientes en Jefe, que ahora quiere cambiarle el nombre a la toma de Poder: en lugar de Opción Pública ahora serán Cooperativas subsidiadas con dinero proporcionado por el Gobierno. Dicho en buen cubano: El mismo perro con diferente collar.

La fórmula no resulta muy complicada: Si queremos que haya abundancia de algo, hay que hacer que su producción sea rentable, no agobiarla con impuestos y veremos crecer ese algo en abundancia. Ah, pero si por el contrario queremos la escasez, sólo tenemos que dejar que el Gobierno se encargue de ello, que aumente sus costos para entonces exprimirnos a los contribuyentes, para subsidiar esa producción incosteable y mantenerla viva, mientras nosotros cada día nos haremos más pobres e incapaces de lograr esa consecución de la felicidad que nos prometieron quienes nos legaron nuestras libertades.

Nobama
Nueva York, 18 de agosto de 2009

1 comentario:

Isis dijo...

En efecto, es el primer gran asalto contra una de las màs grandes realizaciones del hombre: la Constituciòn norteamericana.
Gracias,
Saludos,