jueves, 22 de octubre de 2009

ObaMao contra la libertad de expresión, un aplauso desde Venezuela y Michelle baila el Hula Hula en la Casa Blanca


“Se dejó de cosas Obama y salió a la palestra, vamos a darle un aplauso a Obama (...) Te das cuenta Obama, estás empezando a sentir en carne propia la aspiración de Cambio. Y el no está hablando de revolución, ni está hablando de socialismo...”
Hugo Chávez,
Dictador de Venezuela
Barack Hussein Obama, recibió el aplauso de su colega venezolano, el dictador Hugo Chávez, en su presente guerra declarada contra la Cadena Fox News. El “democrático” líder del Socialismo del siglo XXI y del ALBA, al igual que Obama y sus principales asesores y funcionarios de la Casa Blanca atacó a la Cadena Fox News, también, al igual que Obama, no era la primera vez que Chávez la emprendía contra la empresa noticiosa, recordemos que cuando la reciente reunión de la ONU en Nueva York, al ser cuestionado por un reportero de Fox News, sobre sus estrechas relaciones con el dictador iraní Ahmadineyad, el Gorila Rojo expresó: “Me río cuando veo a la gente de Fox News ¿Sabes cómo la llamó Sean Penn? Sean Penn dijo: ‘los estúpidos de Fox News’... No tú, no tú... por supuesto... Tu pregunta, tu elaboración es artificiosa... Tu mente tiene ahí confusiones... (...) Ustedes están criticando a Obama porque es negro”.

Para nosotros, no resulta casual esta coincidencia entre Chávez y Obama. Cada uno, a su manera y en la etapa de dominación de la sociedad en que cada uno se encuentra, tienen el mismo propósito: silenciar a la prensa crítica e independiente y favorecer a la genuflexa que lo celebra y lo halaga, para poder llevar a cabo su agenda de dominación totalitaria. Los padres fundadores tuvieron este peligro muy claro cuando escribieron nuestra Constitución y sus enmiendas que conocemos como The Bill of Rights. Y no se llamen a engaño, esta campaña sistemática y orquestada por el Presidente y ejecutada por sus amanuenses de la Casa Blanca y de la llamada Gran Prensa no es otra cosa que un ataque a nuestro más preciado derecho: la libertad de expresión.

Para ello, el nuevo Mao, Barack Hussein Obama, se vale del enorme poder de su cargo y de una plaga de alimañas que se hacen llamar periodistas, cuando en realidad son los amplificadores del nuevo Maoísmo Idea Obama que cada vez se perfila más en el 1600 de la Avenida Pennsylvania, en Washington, DC. Por eso, en la más ortodoxa tradición totalitaria y como un ladrón en la noche, en silencio y a la sombra, ObaMao se reunió el lunes pasado con un grupo de “Combativos Periodistas” como los “objetivos” Keith Olbermann y Rachel Maddow de la cadena MSNBC, en lo que la Casa Blanca llamó, cuando trascendió, “an off-the-record briefing with President Obama (un resumen informativo no para publicar)”, en la “orientadora actividad” que duró dos horas y media, también estuvieron presentes Eugene Robinson y E. J. Dionne del Washington Post, Maureen Dowd, Frank Rich y Bob Herbert de The New York Times, Gwen Ifill de PBS, Gloria Borger de CNN, Ron Brownstein del National Journal Magazine, John Dickerson, de CBS News y Jerry Seib de The Wall Street Journal. Por supuesto que en tan selecto grupo no había ningún periodista de Fox News.

De lo que en ese inusual conciliábulo se habló, poco se sabe, y se entiende que los elegidos no quieran perder su posición privilegiada ante los ojos del Gran Timonel, pero en esta profesión a muchos, como sabemos, les pica la lengua. Según nuestra fuente, el Gran Timonel se extendió en una larga perorata introductoria en la que trató de demostrar por qué Fox News no era una operación noticiosa, pero, siempre según la fuente, finalmente se refería a dos espacios concretos: los segmentos de opinión, no noticiosos, de Glenn Beck y el de Sean Hannity y como muestra de que la cadena estaba parcializada, citó el hecho de cómo Fox había publicado todo el escándalo de ACORN y la historia de Van Jones, el Czar de los llamados empleos verdes que tuvo que renunciar por sus inflamatorias declaraciones y por ser firmante de una petición en la que se dice que el 11 de septiembre fue un trabajo sucio interno de la administración Bush. En general las quejas del Presidente son que Fox News era crítica con su administración. Obama, quiso dejar claro que los periodistas debían pensarlo dos veces antes de hacerse eco de cualquier historia que publicara Fox. En esencia, lo que quiere decir es: publiquen nuestra versión y no la del enemigo. No en balde, al día siguiente Keith Olbermann, reclamó para la cadena MSNBC el # 1 en los ratings, porque según la Casa Blanca, Fox News no era una organización noticiosa.

Esta administración lo tiene todo, tiene la presidencia y su partido domina la Cámara y el Senado con mayorías casi sin precedente y una “Gran Prensa Independiente” con ella en el tanque. La Casa Blanca debía poder conseguir todo lo que desea, cada vez que lo desee, pero no puede. No puede gobernar con eficacia y no por culpa de los Republicanos, son una parte de los mismos Demócratas quienes obstruyen su agenda. ObaMao no puede atacar, todavía, a su propio partido, de manera que necesita a alguien a quien echarle la culpa. Y a quién mejor que Fox News. Esta es una política presidencial sin precedentes en esta nación. Como hemos dicho, Nixon lo intentó una vez y ya sabemos como terminó, pero esta vez las listas de enemigos son más amplias y la Casa Blanca trabaja sistemáticamente para marginalizar a todo aquel que se le oponga, no admite críticas ni disidencia y está dispuesta a destruir a quien ose enfrentársele.

Y mientras esta Guerra Sucia se sigue desarrollando desde Washington, de Norte a Sur y de Este a Oeste, la “Gran Prensa Norteamericana, celosa vigilante de nuestras libertades y derechos ciudadanos”, destacaba que la primera dama Michelle Obama, bailó el Hula Hula durante la “Feria de los Niños Sanos” en los jardines de la Casa Blanca y que después del sano ejercicio en el que Michelle logró la envidiable cifra de 142 giros de aro sin que este cayera al piso, todos los asistentes al simpático encuentro “popular”, que ofreció pautas para llevar un estilo de vida sano y activo, disfrutaron de exquisitos y sanos platos preparados por chefs experimentados de todo el país para demostrar que una buena nutrición desde la infancia está al alcance de todos los bolsillos. Entre los platos más celebrados estaban el Gumbo de pollo y de camarones con patitas de puerco, Collard Green y Kimbombó.

Este es el papel que debe jugar la prensa, educar a las masas y guiarlas por el buen camino, que para ocuparnos de los asuntos del Gobierno y decidir que es lo mejor para la ciudadanía y el país, estamos nosotros, dice el gobierno.

¡No faltaría más!

Nobama
Nueva York, 22 de octubre de 2009

martes, 20 de octubre de 2009

El Pensamiento Mao Idea Obama en la Casa Blanca

“En todo el trabajo práctico de nuestro Partido, para que el liderazgo sea correcto necesariamente debe ser “desde las masas, hacia las masas”. Ello significa: tomar las ideas de las masas (ideas dispersas y no sistémicas) y reunirlas (a través del estudio convertirlas en ideas concentradas y sistémicas) y posteriormente regresar a las masas y propagar y explicar estas ideas hasta que las masas las acojan como si fueran suyas, y entonces aferrarse a ellas rápidamente y traducirlas en acción. Después, una vez más, concentrar ideas de las masas y de nuevo regresar a las masas de manera que esas ideas persistan y sean llevadas a cabo. Y así, una y otra vez en una espiral infinita, en la que las ideas serán más correctas, más vitales y ricas cada vez. Esa es la teoría marxista del conocimiento”.
Libro Rojo de Pensamientos de Mao Tse Tung
Este es el núcleo ideológico que hizo que la Revolución Cultural China, que tantos millones de vida cobrara al pueblo chino, resultara tan atractiva para muchos jóvenes idealistas en la izquierda europea y en las Universidades norteamericanas; pero al final como ya recoge la historia, el verdadero significado de aprender del pueblo resultó en realidad aprender sólo del Gran Timonel Mao Tse Tung y sus compinches.

Hoy, en la Casa Blanca, renace el Maoísmo en una nueva faceta: la Idea Obama. Ayer, en la excelente pieza publicada en Nobama sobre la guerra desatada por la administración contra la cadena de televisión Fox News, su autor mencionó de paso la simpatía de la Sra. Dunn, Directora de Comunicaciones de la Casa Blanca, por las ideas filosóficas de Mao Tse Tung, al que elevó a la jerarquía de filósofo. Afortunadamente, el comentario de Anita Dunn, quedó recogido en vídeo porque fue hecho cuando hablaba en la ceremonia de graduación de la St. Andrews Episcopal School en Maryland, el cual se realizó en la Catedral Nacional de Washington. Esta funcionaria del círculo más cercano a Obama celebró al asesino de más de 70 millones de personas no en una iglesia cualquiera, sino en la Catedral Nacional de Washington. No está de más señalar que Anita Dunn está casada con el corrupto picapleitos amigo de Obama, Robert Bauer, quien intentó que el Departamento de Justicia acusara y llevara a juicio a los comentaristas conservadores que criticaron las relaciones de Obama y que castigara a las estaciones de TV que durante la campaña electoral exhibieron un anuncio en el que se criticaba la relación de Obama con el terrorista doméstico de extrema izquierda Bill Ayers.

Estos antecedentes son de suma importancia para comprender la que para algunos resulta inexplicable guerra declarada por Barack Hussein Obama contra la cadena Fox News. Esto no es nuevo, forma parte de la ideología ajena que este moderno Gran Timonel ha traído a la Presidencia de los Estados Unidos, a la decrépita Lucha de Clases que quiere imponer a como de lugar a la nación norteamericana.

En su discurso ante los estudiantes de secundaria Anita Dunn expresó refiriéndose a Mao: “Muchos de ustedes tienen una gran capacidad. Muchos de ustedes se esfuerzan mucho. Unan ambas cosas y ello respondará a la pregunta ¿por qué no? Usualmente no existe una buena razón para ello. Y después la 3ra lección y un consejo vienen de dos de mis filósofos políticos favoritos: Mao Tse-tung y Madre Teresa, que no acoplan entre sí, pero que son las dos personas a las que acudo con más frecuencia para expresar un punto de vista que no es otro que ustedes van a tener que elegir, van a establecer retos, ustedes van a decir por qué no. Ustedes van a tener que imaginarse cómo hacer cosas que nunca antes se hicieron. Pero esa es la cuestión, esas son sus opciones y de nadie más. En 1947, cuando Mao Tse Tung tuvo que enfrentarse a su propio partido, en relación con su plan para apoderarse de China, Chiang Kai Shek y los nacionalistas chinos tenían las ciudades, tenían el ejército, tenían la fuerza aérea, tenían todo de su lado y la gente le preguntaba, cómo puede ganar, cómo puede hacer esto, cómo usted puede hacerlo con todas las probabilidades en su contra y Mao Tse Tung dijo: ‘Ustedes peleen su guerra y yo pelearé la mía’. Piensen en ello por un segundo, ustedes no tienen por qué aceptar la definición de cómo hacer las cosas y no tienen que guiarse por lo que decidieron otras personas en el pasado. Bien. Se trata de sus opciones y de su camino. Se trata de las opciones que se les presenten en su camino, ustedes pelean su propia guerra, ustedes deciden su propio camino. Ustedes deben decidir qué es lo correcto para ustedes. Uno no permite que externamente definan lo bueno que se es internamente. Uno pelea su propia guerra. Y deja a los demás que peleen la suya. Todo el mundo tiene su propio camino. Hasta aquí la cita de la señora Dunn la que pueden confrontar con el vídeo aquí. Poco le faltó para citar a Mao textualmente de nuevo cuando este dijo: “Luchar, fracasar, volver a luchar, fracasar de nuevo, volver otra vez a luchar, y así hasta la victoria”.

Si lo expresado por Anita Dunn les parece familiar con la práctica seguida por la Casa Blanca en todas y cada uno de sus planes de redistribución de la riqueza y de toma del poder absoluto en la economía y la cultura política por parte del Gobierno, no es una casualidad, es que esa es precisamente la versión del Maoísmo Idea Obama que reina hoy en la Casa Blanca.

Algunos podrían decir que una golondrina no hace bandada. Que el hecho de que Anita Dunn admire a uno de los asesinos masivos más prolijos de la historia (se calcula que Hitler asesinó a 26 millones y Stalin alrededor de 30 millones de personas), no quiere decir que el Maoísmo sea la ideología dominante en el círculo estrecho cercano al Presidente y tendrían razón, de ser así, pero no lo es. Anita Dunn, no es la única. Está Ron Bloom. El Czar para la Política de Manufactura de la administración e integrante del Consejo Nacional Económico de Obama, ese mega cuerpo asesor al que Nobama ha bautizado muy bien como la Mesa de Pericles y quien hasta su nombramiento fuera asesor principal del Sindicato Unido de Trabajadores del Acero. Pues bien, Ron Bloom coincide con Mao en que el Libre Mercado es un sinsentido. Afortunadamente, en este caso también contamos con imagen y sonido de lo expresado por el Czar Bloom en una reunión celebrada en febrero de 2008 en la que expresó: “En la medida en que tratamos de aprender acerca de este mundo (se refiere al del Libre Mercado), hemos desarrollado algunos puntos de vista. Hablando en sentido general, existe el chiste de que el Libre Mercado es un sin sentido; sabemos que se trata de jugar en el sistema, de derrotar al mercado, o al menos encontrar a alguien que pague mucho dinero porque está convencido de que obtendrá algo gratis. Sabemos que fundamentalmente se trata del Poder. Que es un juego para adultos y que no tiene límite. Y de alguna forma coincidimos con Mao en que el Poder Político viene en gran medida del barril de un revolver y que usted lo agarra si quiere conseguirlo...”

La cita textual, “una revolución es una insurrección, un acto de violencia a través del cual una clase derroca a otra; el Poder Político sale del barril de un revolver” fue formulada por Mao en el siguiente contexto: “Los cambios en la sociedad se deben principalmente al desarrollo de las contradicciones internas en la sociedad, ello es, la contradicción entre las fuerzas productivas y las relaciones de producción, la contradicción entre las clases y la contradicción entre lo viejo y lo nuevo; es el desarrollo de estas contradicciones lo que empuja a la sociedad hacia adelante y proporciona el ímpetu necesario para sustituir la vieja sociedad con la nueva”.

En esto pensaba Barack Hussein Obama cuando expresó recién electo, a partir de mañana cambiaremos fundamentalmente el rostro de esta nación.

Mao también dijo una vez que el “Partido Comunista debía soportar la crítica, y que la auto-crítica era muy importante. Sin críticas cada sistema de poder es como un pez sin agua”. Pero entonces, en 1957, de repente todos los funcionarios del partido que se atrevieron a criticar fueron eliminados. ¿Por qué? Porque la esencia totalitaria del socialismo no resiste la crítica y no la resiste porque cuando esta se fundamenta científica e históricamente, pone de manifiesto que toda la teoría no es más que una entelequia diseñada para que un grupo de “elegidos” sojuzguen al resto de la tribu bajo el supuesto de que lo hacen por el propio bien de la sociedad.

De ahí que en la esencia del Maoísmo en su variante de Idea Obama, esté este ataque coordinado desde la Casa Blanca contra el Canal Fox News. Al igual que Fidel Castro, Hugo Chávez y demás aprendices de brujo. Obama se queda desnudo al mostrar su verdadera cara.

De la misma forma que en China Comunista, donde el sistema falló por su propia arrogancia y tuvo que regresar al Mercado Libre, así le pasará al moderno Gran Timonel de Washington que pretende ejercer un reinado autoritario en la “Tierra de los Hombres Libres”, en el “Hogar de los Bravos”.

Diego Rodriguez-Arche
Nueva York, 20 de octubre de 2009

lunes, 19 de octubre de 2009

La Casa Blanca de Richard M. Nixon y Obama y su guerra contra Fox News


La estrategia de prensa de la campaña de Barack Hussein Obama, que condujo a su elección el pasado noviembre, se concentró en hacer que los medios cubrieran lo que la campaña quería y ejerciendo un “control” absoluto sobre la cobertura, eso es lo que dijo Anita Dunn, la Directora de Comunicaciones de la Casa Blanca en República Dominicana a principios de este año.

En el vídeo que encabeza esta pieza, Dunn describe en detalle la estrategia para los medios utilizada por la campaña de Barack Hussein Obama para llegar a la Casa Blanca.

“Raramente comunicábamos a través de la prensa algo sobre lo que no tuviéramos un control absoluto”, se ve y oye decir a Dunn, quien admite que la estrategia “no siempre fue popular entre la prensa”. Pero como todos sabemos, la Gran Prensa invertía mucho en esta elección para rebelarse y como tantas veces hemos repetido, inclinaban la cerviz ante el objetivo final que era elegir a Obama.

Esta misma Dunn es la que desató la Guerra contra la cadena Fox News el domingo de la semana pasada en una ofensiva coordinada de todas las figuras principales de la administración Obama, algo que por mucho que hemos investigado es casi inédito en la historia de las relaciones entre la Prensa y la Casa Blanca, como no sea la prohibición similar de otorgar entrevistas o brindar información exclusiva ordenada por Richard Nixon contra el periódico New York Times cuando Watergate. En una operación con características prácticamente idénticas la Sra. Dunn, una admiradora del “Gran Filósofo Mao Tse Tung”, según sus propias palabras, inició la guerra de la Casa Blanca contra Fox News, diciendo que la cadena “enmascaraba el periodismo de opinión como noticias”.

Ya antes del feroz ataque de Dunn, desde agosto, la Casa Blanca dejó de enviar representantes al programa Fox News Sunday, como represalia a que su conductor, Chris Wallace, verificó en el aire contra los hechos, las controversiales aseveraciones hechas por Tammy Duckworth, Subsecretaria del Departamento de Asuntos de los Veteranos.

Si analizamos lo expresado por la Sra. Dunn en el vídeo ya mencionado, no es muy difícil comprender la razón por la que la administración Obama, desata la guerra contra una cadena informativa específica. Como en la Casa Blanca de Nixon, la corrupción en la de Obama es enorme y la mentira, la desinformación y el secretismo imperan en todos los niveles de la administración. El mismo Obama que prometió en la campaña que la suya sería la Presidencia más transparente de la historia de los Estados Unidos.

Una prensa verdaderamente independiente y que haga las preguntas difíciles que el pueblo norteamericano espera que hagan a quienes están en el poder, no puede existir en un gobierno cuyo objetivo es transformar el país a una ideología extraña como el socialismo. De ahí que los norteamericanos estén ya en mayoría sorprendente en contra de las políticas del Presidente. Así, en la encuesta más reciente sólo el 43% de los encuestados dijeron que ahora votarían por Obama como Presidente. Cuando miramos sus cifras de aprobación vemos que ha retrocedido al grupo de los 40, pero más interesante aún, es que cada día que pasa pierde más votantes independientes con 46% en contra y 41% a su favor. En el ObamaCare, las cifras son peores todavía: 53% están en contra y sólo el 36% a favor. Evidentemente esta no es una buena señal. Pero no son sólo los independientes, entre los ciudadanos de la tercera edad, la inmensa mayoría está en contra del ObamaCare y del mismo Obama. Pero si para algunos las cifras anteriores resultan sorprendentes, ¿qué dirán entonces cuando lean las siguientes? Los estudiantes de college, un sector que le brindo un apoyo abrumador en las elecciones, están en contra del ObamaCare en una proporción de casi 2x1. Y desde la extrema izquierda las cosas no se ven muy prometedoras tampoco, de ahí que Obama esté desesperadamente haciendo concesiones a su base natural, hoy anunció que ordenó que se deje de perseguir el consumo de la llamada “marihuana medicinal” y que demorará la decisión sobre Afganistán hasta que esté clara allí la situación de las elecciones.

Hoy, también ha recibido otros dos reveses a su política externa. Irán dice que aunque reciba combustible nuclear, no dejará de enriquecer uranio. Moscú rehusó vincular la retirada incondicional del sistema antibalístico de Chequia y Polonia y no hará ningún compromiso relacionado con Irán y dejó entrever que no apoyaría ningún tipo de sanciones contra los Mullahs. Hace seis meses, Barack Hussein Obama, revertió la decisión de George W. Bush de boicotear y no aceptar un asiento en el desprestigiado desde su fundación Consejo para los Derechos Humanos de la ONU. Al explicar aquella decisión la Embajadora ante la ONU, Susan Rice explicaba: “No vemos ninguna ventaja en estar fuera y simplemente criticar sin tener ningún tipo de influencia significativa”.

Habría que preguntarse ¿Qué ha logrado Obama con su “influencia significativa” en ese Consejo? El viernes pasado, el Consejo hizo suyo el mal oliente Informe Goldstone, el cual acusa a Israel, el único aliado de los Estados Unidos en el Medio Oriente, de crímenes de guerra por defenserse contra Hamas y sus ataques lanzados desde Gaza contra el estado judío. En una vergonzosa votación de 25 a favor y sólo 6 en contra (Hungría, Italia, Holanda, Eslovaquia y Ucrania se unieron a los EE.UU.), el Consejo envió el informe al Consejo de Seguridad. El próximo paso que esperan los enemigos de Israel: La Corte Internacional de Justicia. Claro que era estúpido pensar que la sola presencia de los Estados Unidos en el Consejo haría que los dictadores y violadores de los derechos humanos que allí se sientan cambiaran su odio contra Israel para agradar a Obama y mucho menos cuando este último no ha perdido ocasión en enviar la señal de que la cosa es presionar a Israel para que desaparezca.

Como certeramente advirtió el Ministro israelí de Relaciones Exteriores Avigdor Lieberman, “la próxima vez, serán los soldados y oficiales de la OTAN en Afganistán y después los soldados rusos en Chechenia” quienes tendrán que enfrentar un juicio ante la Corte Internacional de Justicia. Lo cierto es que lo único que ha logrado Obama con meternos en ese antro podrido del Consejo es darle credibilidad a los dictadores y violadores de los derechos humanos, normal en él, y de paso denigrar a los Estados Unidos como a él le gusta hacer.

No en balde tiene que hacerle la guerra a la cadena de televisión con los mayores ratings en la nación y que es la única que no está ni estuvo en el tanque con él.

¿Quién nos iba a decir en noviembre de 2008 que Obama y Nixon se parecerían tanto?

¿Verdad?

Nobama
Nueva York, 19 de octubre de 2009